lunes, 19 de agosto de 2013

los sentidos

              El gusto

El sentido del gusto se encuentra en la lengua. La lengua es un órgano musculoso ubicado dentro de la boca o cavidad oral. La sensación que un alimento produce en el sentido del gusto se llama sabor.
El gusto actúa por contacto de sustancias químicas solubles con la lengua. El ser humano es capaz de percibir un abanico amplio de sabores como respuesta a la combinación de varios estímulos, entre ellos textura, temperatura, olor y gusto.
El sentido del gusto depende de la estimulación de los llamados "botones gustativos", las cuales se sitúan preferentemente en la lengua, aunque algunas se encuentran en el paladar; su sensibilidad es variable. La lengua presenta unas estructuras, denominadas papilas, que le confieren su aspecto rugoso. En ellas se encuentran los botones gustativos, donde se asientan los quimiorreceptores juntos con las células epiteliales que les sirven de sostén.
Partes de la lengua
La lengua es el apéndice que en el interior de la boca contribuye a mezclar la saliva con los alimentos que están siendo triturados por los dientes.
Es un músculo cubierto con pequeñas protuberancias denominadas papilas gustativas, alrededor de diez mil, que tienen muchas terminaciones nerviosas. Las distintas partes de la lengua contienen papilas gustativas que poseen funciones particulares.
Otra cosa importante que debemos recordar sobre el sentido del gusto es la función de la saliva. La saliva también nos ayuda a saborear la comida. Al poner un dulce sobre la lengua no se siente el gusto de inmediato, ya que necesitamos mojar el dulce con la saliva, masticarlo, y mezclarlo con más saliva antes de poder saborearlo. La saliva se mezcla con la comida y distribuye los sabores a todas partes de la lengua

El tacto

El sentido del tacto o mecanorrecepción es aquel que permite a los organismos percibir cualidades de los objetos y medios como la presión, temperatura, aspereza o suavidad, dureza, etc.

En el ser humano se considera uno de los cinco sentidos básicos. En el sentido básico se halla principalmente en la piel , órgano en el que se encuentran diferentes clases de receptores nerviosos que se encarga de transformar los distintos tipos de estímulos de exterior en información susceptible para ser interpretada por el cerebro.
La piel se divide en tres capas: epidermis, QUE ES LA CAPA SUPERFICIAL, LA DERMIS  Y LA HIPODERMIS QUE ES LA CAPA MÁS PROFUNDA. La epidermis: está constituida por tejido epitelial y en su estrato basal o germinativo encontramos la denominada melanina que es el pigmento que da color a la piel y la dermis por tejido conjuntivo. 
En esta capa encontramos los anejos cutáneos que son las glándulas sebáceas , las glándulas sudoríparas , el pelo y las uñas. y la hipodermis formada por tejido conjuntivo adiposo.
EL TACTO PERTENECE AL SISTEMA SENSORIAL CUYA INFLUENCIA ES DIFÍCIL DE AISLAR O ELIMINAR.

                                        La vista

El sentido de la vista es el que permite al hombre conocer el medio que lo rodea, relacionarse con sus semejantes, y el hombre debe contar con los elementos adecuados para captar e interpretar señales provenientes de aquellos. Las imágenes visuales le proporcionan a través del ojo, información sobre el color, la forma, la distancia, posición y movimiento de los objetos.

Partes del ojo:
 1) El iris. Es la parte coloreada del ojo. Regula la entrada de luz aumentando o disminuyendo su tamaño según la intensidad de la misma.
 2) La pupila. Es el orificio central del iris. Se dilata o contrae en función de la cantidad de luz existente.
 3) El cristalino. Es la parte que enfoca el haz de luz en la retina. Tiene forma de lente biconvexa. 
 4) La córnea. Es una de las partes externas del ojo. Protege al cristalino y al iris permitiendo el paso de la luz.
 5) La retina. Es la parte del ojo sensible a la luz. Está compuesta por los conos y los bastones. Su función es dar información sobre la nitidez, color y brillo.
 6) La esclerótica. Es la membrana más externa que protege y da forma al ojo. Es la zona que conocemos como “lo blanco del ojo”.
 7) Nervio óptico. Conduce los impulsos nerviosos de los conos y bastones de la retina hacia el cerebro. Esto permite la formación de las imágenes en nuestra cabeza. 
 8) El humor acuoso. Es un líquido incoloro localizado entre la córnea y el cristalino. Su función es lubricar y alimentar el ojo por medio de las proteínas que contiene.
 9) El humor vítreo. Es una sustancia gelatinosa y transparente contenida en el interior del glóbulo ocular y encargada de ejercer presión sobre él.

     
          La audición

La audición es uno de los cinco sentidos del ser humano (el tacto, el olfato, el gusto, la vista y la audición). Una reducción en la habilidad de oír se denomina pérdida auditiva o pérdida de audición. Nuestra audición percibe los sonidos que nos rodean durante las 24 horas del día. Por ello, la audición es un sentido que siempre está en funcionamiento. 

La audición funciona a varios niveles: cuando oímos los sonidos de fondo, como por ejemplo el tráfico, o cuando oímos alarmas, como por ejemplo el despertador. Sin embargo, la función más importante de nuestra audición es la de oír el habla, es decir, el comunicar con otras personas.
La audición es uno de los cinco sentidos del ser humano. La función de la audición es transformar ondas sonoras en impulsos nerviosos perceptibles para el cerebro, el cual los transforma a lo que entendemos por sonido. Para poder hacerse una idea de qué es una pérdida auditiva, es necesario conocer la función de la audición y del oído. Los sonidos que se transportan por el aire podrían describirse como variaciones en la presión o como oscilaciones en las moléculas del aire. Estas variaciones en la presión forman ondas sonoras que pueden ser percibidas por el oído humano.


El oído es la parte principal del sentido de la audición. El oído recoge las ondas sonoras y las transforma en impulsos nerviosos que pueden ser interpretados por el cerebro.
Las tres partes del oído:
  1. El oído externo
  2. El oído medio              
  3. El oído interno

El oído externo:
El oído externo está formado por el pabellón auricular y el canal auditivo. El pabellón auricular funciona como una especie de embudo, recogiendo las ondas auditivas y dirigiéndolas al tímpano. El tímpano, situado en el extremo del canal auditivo, forma el límite entre el oído externo y el oído medio.
El oído medio:
El oído medio es un espacio lleno de aire cuya presión se ajusta gracias a la trompa de eustaquio, que conecta el oído con la nariz y la faringe. En el oído medio hay tres huesecillos denominados el martillo, el yunque y el estribo. La combinación de estos tres huesecillos funciona como un sistema de palanca que recibe los movimientos del tímpano y los envía a la parte del oído que se encarga de procesar el sonido.
El oído interno:
El oído interno es una estructura ósea llena de líquido con forma de caracol. La conexión entre el oído medio y el oído interno se denomina la ventana oval. La platina del estribo funciona como un pistón que genera movimiento en el líquido del oído interno. En la cóclea hay aproximadamente 23.000 células ciliadas externas (células sensoriales) que se ponen en movimiento debido a las ondulaciones del líquido. Cuando se activan las células ciliadas, éstas envían impulsos al cerebro, el cual los interpreta como sonido. Además del caracol, en el oído interno se encuentra el órgano del equilibrio.

            El olfato

 El olfato es el más sensible de los sentidos, ya que unas cuantas moléculas –es decir, una mínima cantidad de materia– bastan para estimular una célula olfativa. Detectamos hasta diez mil olores, pero como las estructuras olfativas, al igual que el resto de nuestro cuerpo, se deterioran con la edad, los niños suelen distinguir más olores que los adultos.

Además de advertirnos de peligros como el humo y los gases tóxicos o venenosos, el olfato contribuye con el gusto, estimulando el apetito y las secreciones digestivas.

La nariz es el órgano por el cual penetran todos los olores que sentimos desde el exterior. Es un cuerpo saliente del rostro, ubicado entre la boca y la frente, por debajo de la cavidad craneana.

El olfato está relegado al fondo y a lo alto de la nariz, cuyo interior está constituido por dos cavidades, las fosas nasales, separadas por un tabique. Cada fosa se divide en dos partes: la anterior o vestíbulo, cubierta por una membrana mucosa llamadaepitelio olfativo, y la posterior, recubierta por la mucosa nasal, que es donde se encuentran los receptores olfativos que nos permiten captar los distintos olores. Cada célula receptora termina en pequeños pelitos, desde seis a 20, llamados cilios. Estos están conectados a columnas de células que sirven de soporte a los receptores del olfato.
 Partes de la nariz


-Seno frontal
-bulbo olfativo
-seno esfenoidal                                        
-faringe nasal
-Amígdala faríngea
-cavidad nasal
-cartílago
-hueso nasal




3 comentarios:

  1. ahora si pueden respondan a las siguientes preguntas:

    ¿Para que nos sirven los sentidos en nuestra vida cotidiana?
    ¿Cómo está conectado nuestro sistema nervioso a nuestros sentidos?
    ¿Sin los sentidos que sucedería en nuestro cuerpo?

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    Respuestas
    1. 1. nos sirven para persivir todo a nuestro alrededor ypoder desenvolvernos en la sociedad
      2.esta conectado por el sistema nervioso y el cerebro
      3.nos haría mas difícil hacer unas actividades de la vida diaria

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  2. el sistema nervioso le dice que hacer.
    ya no serviría de nada.

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